Ademar arrolló al Barça

El Ademar de León volvió a ser la bestia negra del Barcelona en la Copa Asobal, conquistando su segundo título en su segunda final, ambas ante los azulgrana, a los que humillaron en su propio feudo (25-31), después de una extraordinaria defensa en la primera parte y la magistral dirección de un increíble Daniel Sarmiento.

Han tenido que pasar diez años para que los leoneses volviesen a inscribir su nombre en el palmares del trofeo. Hasta ayer sólo lo habían logrado en una ocasión: en 1998, en Zaragoza, y, precisamente, también frente al Barcelona (31-30).

Tras el triunfo en la semifinal frente al Ciudad Real, el Barcelona era el favorito. Lo tenía todo a favor: la afición, el factor pista y su poderosa plantilla. Pero la ausencia de Iker Romero (no se sabe bien si por una lesión o por decisión técnica) parecía equilibrar un poco la balanza de la final en los pronósticos.

El técnico del Ademar, Jordi Ribera, tomó buena nota de los puntos débiles azulgrana y planteó un sistema defensivo flexible, cambiando de 6-0, a 4-2, a 5-1 y hasta a una mixta sobre Nagy constantemente, descentrando totalmente el ataque local.

Laporta.

Además, el ritmo ofensivo de los de Ribera destrozaba la defensa barcelonista, la mejor de la liga Asobal, y en sólo 15 minutos lograba una clara ventaja (3-8). El Palau se quedó tan helado como el rostro del presidente azulgrana, Joan Laporta, que asistió impertérrito a la extraordinaria exhibición de la escuadra leonesa, que nunca bajó la guardia.

Ni Boldsen ni Ben Amor lograron imponer un ritmo ofensivo claro y ,además, el Barcelona se encontró con otra muralla casi infranqueable: el meta croata Mirko Alilovic.

Los dos extremos del Ademar, Denis Krivochlikov (con una velocidad increíble) y Martin Stranovsky (máximo goleador del torneo), bascularon una y otra vez hacia el lateral del ataque del Ademar y con dos tantos consecutivos, establecieron la máxima ventaja para su equipo antes del final del primer tiempo (9-17). Sarmiento remató al inicio de la segunda mitad (11-20, m. 36) y el Barça ya dobló la rodilla.

Cadenas

"Ha sido decepcionante. No estuvimos a la altura de lo que debe ser una final y no tengo excusas al pésimo juego que hemos realizado. Asumo mi responsablidad y lamento la imagen que hemos dado".

Jordi Ribera

"No esperaba que en la primera parte ya tuviésemos nueve goles de ventaja. Esto hizo que nosotros jugásemos a gran nivel y el Barcelona se precipitase totalmente. En la simplicidad estuvo el éxito".