"Lo primero que haré en Vigo es ir a la pelu"

Chus Lago

"Lo primero que haré en Vigo es ir a la pelu"

"Lo primero que haré en Vigo es ir a la pelu"

La alpinista (Vigo, 25-12-1964) se ha convertido en la primera española en alcanzar el Polo Sur. Tras 59 días de expedición en solitario y más de 1.100 kilómetros, habló para AS antes de volar a Punta Arenas (Chile).

Cuando ya iba a desistir, contesta usted a mi llamada. Suena como si estuviera en Vigo, no en el Polo Sur.

Es la primera que recibo en todo el d no es fácil comunicarse, apenas hay batería.

Pues seré breve. ¿Qué se siente al ser la primera española en alcanzar el Polo Sur?

Que sabía que iba a ser difícil, pero no tanto. Han sido 59 días y mil y pico kilómetros. Ahora estoy en Amundsen-Scott, a treinta metros de la estaca del Polo Sur.

El sur del sur, más al sur imposible...

Sí, pero parece que estuviera en casa, con todo lo que he pasado.

¿Lo peor?

Tres días en los que soporté una tormenta con vientos de 170 km/h. Pensaba que la nieve me iba a reventar, pero había que montar la tienda.

59, 60, 61 días... Aclárenos cuánto duró la expedición.

Exactamente 59. Dedicaba 12 ó 14 horas a caminar y unas seis a dormir. Tenía que cumplir unos 25 kilómetros diarios, no me quedaba otra.

La gesta adquiere aún mayor relieve al realizarla usted en solitario. ¿Cómo combatía el silencio?

No tenía música y sufrí tres episodios de ansiedad. En mi cabeza trataba de mantener la calma. Me decía: "Tranquila, tranquila, que todo va bien". Pero me ponía nerviosa, así que me inventaba historias.

Como cuáles.

Eran casi todo viajes, pero no de deporte. Uno consistía en ir a Oslo, a ver el museo en el que está el barco polar Fram, que construyeron redondeado. Me ponía un jersey de cuello cisne, los vaqueros, cogía la cámara de fotos y me iba al museo, como una turista más.

Y si no, creaba otro 'mundo de Alicia' y olvidaba el frío.

Otro de los viajes era a Nepal, a los campos de arroz. Historias que siempre me han cautivado y con las que me sentía tranquila, a gusto.

Y así, cuento a cuento, llegó al Polo Sur. ¿Qué pesaba más, el hambre o el frío?

Tenía buena ropa para combatir las bajas temperaturas (rondando en ocasiones los 50º o 60º bajo cero). Al final, el hambre casi era peor, he perdido muchos kilos.

¿Su primer 'oasis' para el estómago?

Al llegar me dieron un termo con agua caliente y sobres de cacao. Es el colacao que mejor me ha sabido en la vida. Poco a poco voy recuperando el cuerpo.

Y en nada, vuelta a casa.

Estoy entre la hora de Chile y la de Nueva Zelanda, que son 16 más. Esto es una locura, pero creo que en ocho horas viene una avioneta que me llevará a Punta Arenas. Y el 18 vuelvo a España.

¿Qué es lo primero que hará al llegar a Vigo?

Ir de compras y a la pelu. Menuda pinta tengo.