Oficialmente España debutó en el Mundial, aunque hay partidos, como el de ayer, que no merecen la oficialidad de un torneo de tanto nivel, pero es lo que tiene el asunto de los cupos continentales. Palizón a Kuwait, y ya está. Pues no, no está. El partido sirvió para que los jugadores de la Selección supiesen dónde están y quién manda aquí, porque se pasaron 30 minutos vagueando por la pista, sumando diferencias por inercia pero sin jugar de verdad al balonmano. Total, en el descanso el seleccionador les llamó a capítulo, y resumido más o menos les dijo: "Chavalitos, esto es España y yo soy Valero. Ojito, que no estoy aquí para ver esto. Hale, a jugar".

Nueva cara.

Y salió la Selección en la segunda parte y aquello tuvo otro cariz: defensa, ataque, velocidad, ganas de lograr un marcado importante. Con Kuwait mirando de reojo a nuestro seleccionador, a ver si tenía un poco de misericordia. Pero Valero ni se inmutaba ahora; ya había hecho bastante en la primera mitad de pie y corrigiendo a sus hombres. El toque de atención había surtido efecto y el partido estaba decidido.

Fue un entrenamiento al que le faltó intensidad en la primera parte. Rivera confeccionó dos equipos y, entre ambos, se repartieron los minutos. En el 16 de la primera parte cambió a los seis jugadores de pista por los del banquillo, y en la segunda fue en el minuto 15. Barrufet y Sierra, se repartieron una mitad cada uno. No hubo cambios de defensa y ataque, y como una variación al guión, en la segunda parte, en una inferioridad, Ruesga salió por Juan Andreu para atacar en dos ocasiones sin pivote. Por cierto, Andreu, el superdebutante, cumplió: tardó seis minutos en sumar su primer gol en un choque oficial en el que todos los españoles de campo marcaron al menos dos tantos.

Cuba luchará por evitar otro correctivo

Cuba dudó en participar hasta el último momento, pero aquí está, aunque mejor que no hubiese venido porque su selección no tiene nada que ver con la que formaron los Urios, Rivera, Fis, Ivo Díaz, Reinaldo Pérez, o en los tiempos anteriores, cuando la estrella era Duranona, un cañonero descomunal. Ayer encajó una amplia derrota ante Suecia, y lo normal es que esta tarde ante España sufra otro correctivo.