La decisión de Tiger Woods­ de abandonar indefinidamente el golf ha causado una conmoción en el mundillo del golf, que se queda sin su mayor estrella y captador de audiencias.A corto plazo este paso tendrá unas repercusiones muy importantes para sus patrocinadores, la PGA y las cadenas de televisión estadounidenses, que ya buscan alternativas.

Su admisión de que ha cometido adulterio y que su matrimonio se desmorona ha hecho tambalear a los consejos de dirección de firmas como Nike, Gatorade, Gillette o los relojes Tag Heuer, algunos de sus anunciantes que le pagan 100 millones de dólares anuales y que esperaban que esta polémica acabara con la llegada de las Navidades.

La bebida energética Gatorade ha comunicado que ya tenía decidido con anterioridad no renovar su relación con Tiger. Y Gillette, "respetando su deseo de privacidad", también va a retirar los anuncios en que aparece.

Muchos torneos temen que otros patrocinadores les retiren su apoyo económico al no contar ya con el tremendo gancho de captación de Tiger. Este efecto parece aún más devastador en el caso de las cadenas de televisión. Se calcula que las audiencias sin Woods cada semana en la pequeña pantalla pueden descender en un 50 por ciento."En otras ocasiones hemos sobrevivido sin él, pero hay que reconocer que será difícil hasta que no sepamos lo que quiere decir con marcharse 'indefinidamente", reconoce Sean McManus, el presidente de CBS Deportes.

Tiger Woods no ha revelado cuál será el tiempo de estas vacaciones forzosas. Pero algunos medios informativos fechan su regreso el 9 de abril, en el inicio en Augusta (Georgia) del Masters.