El Atlético sigue en cabeza tras golear a un buen Cuenca

A la espera de que el Atlético de Madrid y el Barcelona choquen entre ellos, el liderato de la Liga es un mano a mano entre ambos, que se decide por el mejor margen de goles. El sábado, el Barcelona sacó 20 de renta, y obligó al Atlético a golear a un Ciudad Encantada de Cuenca que no se entregó nunca, y que tenía bien aprendida la manera de no dar facilidades: vamos, que no iba a jugar al ritmo local, para que los de Dujsebaev llegasen otra vez a los 50 goles.

El Atleti, eso sí, impuso ese ritmo asfixiante que al final pasa factura. Y aunque jugó con Cañellas de único central a lo largo de los sesenta minutos, no sumó los goles de contragolpe habituales y en ocasiones el juego se ralentizó, casi alcanza su media de esta temporada (39 tantos por partido).

Los goles locales vinieron por parte de Lazarov y de Markussen, en la primera línea, y de los pivotes en la segunda. Zupo había dado orden de evitar que Fernández o Aguinagalde les sacasen exclusiones, y de ahí que a veces les dejasen tirar.

Por sólo cuatro tantos el Atlético mantiene el liderato que le arrebató al Barça el día del Pilotes. Cuestión de honrilla.