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Rory McIlroy ataca la hegemonía de Donald
El número dos firmó un día final memorable (65) que culminó con un birdie sacándola del búnker en el 18. Venció y se quitó una espina. "Quería ganar desde 2008", decía el norirlándes.
Luke Donald recibió ayer dos ataques directos a su hegemonía en el ránking y en el Race to Dubai. La primera embestida llegó de Rory McIlroy en Hong Kong, donde Álvaro Quirós se desplomó entre los árboles de Fanling. Al contrario que el gaditano, el número dos resucitó tras dos días grises, firmando un día final memorable (65) que culminó con un birdie sacándola del búnker en el 18. Venció y se quitó una espina. "Quería ganar desde 2008", decía el norirlándes, dos veces segundo aquí.
El prodigio McIlroy, de 22 años y ganador este año del US Open, se coloca en posición de desbancar la próxima semana a Donald en la lista europea de ganancias. "No esperaba menos de Rory. Era consciente de que me metería presión. Estoy deseando que llegué la final el jueves", comentaba el número uno, séptimo en el Nedbank de Sudáfrica donde reapareció tras un tiempo parado por el fallecimiento de su padre y el nacimiento de su hijo.
Para ser líder de ganancias en Europa, ya lo es de Estados Unidos, Donald necesita estar entre los ocho primeros en caso de que McIlroy gane en la final de Dubai. El norirlandés tiene esta cita en el punto de mira. "Fue una motivación extra en Fanling". La otra era "no perder el segundo puesto del ránking" que peligró por culpa de Lee Westwood, ganador en el Nedbank sudafricano y autor del segundo ataque directo que recibió Donald ayer a su reinado.