¿Su primer tanto con el primer equipo del Sporting le habrá sabido a gloria?

Sí, porque llevaba bastante tiempo sin jugar y sin ser titular, y ahora que he vuelto a hacerlo, además, me viene un gol que es uno de los más importantes de mi corta carrera como futbolista.

Y vaya gol...

La verdad es que salió bien. Vi venir la pelota y la pegué con toda el alma, le puse todo lo que pude. Fue donde tenía que ir y, afortunadamente, entró.

Además, desde fuera del área, algo raro en el equipo...

Era algo que el entrenador nos demandaba, sobre todo a los centrocampistas. Y da la casualidad que en la semana que más hablamos de estos lanzamientos, los dos mediocentros marcamos.

¿Podía imaginarse este momento después de haber estado en la lista de descartes el pasado verano?

Me siento bastante reconfortado, porque yo aposté por seguir aquí y buscar oportunidades, y gracias a Dios, a día de hoy, estoy agradecido a mi trabajo y bastante contento por haber tomado en su momento la decisión de no marcharme de aquí.

¿Cómo ve al equipo después de esta victoria?

Jornada a jornada ha ido creciendo, siempre hacia arriba y sin estancarse. Se han hecho cosas buenas y con el paso del tiempo hemos mejorado mucho. Tenemos que seguir en esa línea de juego. Los goles seguirán llegando.

La moral para la Copa estará por las nubes...

Claro, porque en Salamanca, además de salir bien las cosas, destacó mucho el ambiente que se creó entre la afición. La gente estaba un poco crispada con el equipo y con nuestro juego y los resultados la hinchada ya está en sintonía con el equipo. Nos vendrá muy bien este apoyo mañana.